top of page

Tongoy era una apacible bahía, pero riquísima, abundaba de todo, mariscos, pescados, ostiones, machas, langostinos...

Tanto abundaba que había grandes varazones y los pescadores a veces no tenían a quien vender tanto marisco…

 

Cuando pescaba uno, la mayoría del pueblo comían pescado; si había que varar un bote, todos ayudaban, todos vivían sanamente, todos se conocían, entonces no había competencia...

Julio Torrejón Cortes

(Fragmento entrevista Memorias del Siglo XX)

Rodeados de Mar...

©2014 por Biblioteca David León Tapia

& Ingrid Wells Venteo

 

bottom of page